Ahora, ¿quién podrá defenderlos? Y no me refiero a la muerte de Chespirito y con ello del Chapulín Colorado, sino a que ahora los alcaldes ya no tienen quién los defienda. Los alcaldes se tienen que sujetar a lo que diga la autoridad mayor en el estado porque sus representantes legislativos no tienen el valor ni la fuerza para defenderlos.

Los legisladores hoy en día se quedan calladitos, diciéndole SÍ a todo lo que les envía de la instancia mayor, aunque debe de ser la instancia igual porque son tres poderes y el Poder Legislativo es igual al Poder Ejecutivo y al Judicial, pero la realidad no es así: el Poder Ejecutivo es el que manda y el Legislativo es el que obedece. Por eso, los alcaldes ya no tienen quién los defienda.

Y bueno, usted me podrá decir ¿cuándo los diputados han defendido a los alcaldes en funciones de las medidas que tome la autoridad estatal y en perjuicio de los ediles?

Y la respuesta puede ser que nunca, porque siempre se ha impuesto la voluntad de la mayoría, que siempre es del mismo color que la que manda en el otro poder.

Pero al menos se veía que los diputados de oposición levantaban la mano y defendían o se oponían a que se hiciera la plena voluntad del que mandaba en el otro poder.

Lamentablemente hoy en día ya no tenemos oposición legislativa (ni política) en el estado; ya los diputados de supuesta oposición han dejado de ser opositores al sistema, y se han convertido en legisladores a modo, es decir, diputados que ya no están dispuestos a defender a los alcaldes cuando se tengan que defender y ni mandarlos a la cárcel cuando se tenga que hacer.

Ya no. Ahora todos parecen del mismo color.

Y es que ahora resulta que el Estado asume el control del pago del impuesto predial de los 39 municipios del estado y a pesar de que hubo alcaldes que se opusieron a esta medida, no les quedó otra que aceptarlo porque es una "orden mayor".

Incluso, los alcaldes de oposición, por mucho que pudieran oponerse, los mismos diputados "de oposición" (solo entre comillas) tuvieron que convencerlos para que aceptaran la medida.

Entonces, ¿quién defenderá a los alcaldes?

Y más aun: la medida tomada tiene un objetivo, el préstamos solicitado por el Gobierno del Estado de 967 millones de pesos a la cual los legisladores de "oposición" (solo entre comillas) avalaron el préstamo, es decir, avalaron que el Gobierno Estatal siga endeudándose, cosa que no fuera avalada en otras legislaturas por los diputados de "oposición" (solo entre comillas).

Bueno, hubo uno que se opuso, el del partido Movimiento Ciudadano, pero los del PAN, si bien es cierto que no votaron a favor, tampoco lo hicieron en contra y la diputada petista no fue a sesión.

Por eso el punto es... claro, así de claro: en Durango la oposición ha dejado de ser oposición, ya ni entre comillas (para qué gastarlas). A la oposición algo le dieron o con algo negociaron porque de otra manera no entendemos por qué tan pasivos, por qué tan calladitos. Qué esperanzas que en otras legislaturas pasara esto. Por eso, hoy en día el Congreso del Estado ha dejado de ser la casa para defender a los duranguenses, a los alcaldes y a la sociedad.