Por primera vez en nuestra historia electoral, un precandidato decidió retirar su propaganda e invitar a los medios de comunicación para que lo atestiguaran. Enrique Alfaro, invitó a los periodistas a ver cómo se retiraba un espectacular, al tiempo que les entregaba una lista detallada de sus gastos de precampaña.

Este inédito ejercicio de transparencia y de sensibilidad ante una ciudadanía cada vez más harta de los políticos tradicionales y de los exagerados bombardeos de publicidad y propaganda, dignifica estas precampañas marcadas por los golpes bajos y por alianzas de dudosa calidad moral.

Unas horas después de que Alfaro anunciara el retiro de sus espectaculares y anuncios en quioscos, el PAN en conferencia de prensa acusó al precandidato de Movimiento Ciudadano de rebasar sus topes.

Nada nuevo bajo el sol. Ya sabemos que el PAN, como en la fábula de La Fontaine en la que el astuto mono convence al gato ingenuo de sacar las castañas del fuego para comérselas sin ningún riesgo, y a contra corriente de su historial de dignidad y real opositor del PRI, le hace el juego sucio a ese partido para tratar de debilitar a Alfaro. ¿Qué oscuros intereses hay detrás de este amasijo de facto, para apuntalar al candidato priista por Guadalajara? No lo sabemos. Lo que sí es que su atropellada y débil presentación del jueves, carente de argumentos sólidos, demuestra la desesperación por rebajar al abanderado de Movimiento Ciudadano al nivel de los demás.

Evidentemente, sí hay diferencias. No todos son iguales. ¿O alguien se cree que Ricardo Villanueva, ex responsable de las finanzas del Gobierno del Estado, experto en ese tema, no sabe cuánto dinero se ha gastado en su millonaria precampaña?

En estas precampañas existe una clara estrategia del PRI para desalentar la participación ciudadana diciendo que todos los políticos son iguales. Es la única manera posible en la que creen saldrán adelante, pero son miles los ciudadanos que, con el ejemplo diario, están demostrando que existe otra forma de hacer las cosas.

Posdata: Carlos Mercado Tinoco fue nombrado hace días titular de la Unidad de Capacitación de los Servidores Públicos del Ayuntamiento de Guadalajara. Seguramente con su desempeño dará buenas cuentas al Alcalde Ramiro Hernández y a la comunidad tapatía.