Con un incremento de 25 por ciento desde el comienzo del sexenio, la deuda externa de México, una de las variables de mayor impacto por la depreciación del peso, ascendió a 269 mil 941 millones de dólares al término del primer semestre de 2015, indican informes oportunos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Esa cantidad es superior en unos 19 mil millones de dólares al monto actual de la reserva de divisas del país, sumado al eventual crédito flexible puesto a disposición de México por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en caso de que el país lo requiera. Entre ambos suman unos 250 mil 220 millones de dólares.
Pero la reserva de divisas del país disminuye en por lo menos mil millones de dólares cada semana, mientras el endeudamiento externo de México aumentó en 54 mil 137.7 millones de dólares entre 2013 y el primer semestre de 2015, al pasar de 215 mil 804 millones de dólares a otro de 269 mil 241 millones.
Por su estructura, el débito externo del sector público representa 69 por ciento del total, con 162 mil 358 millones de dólares; el de las empresas no bancarias del sector privado se sitúa en casi 91 mil 100 millones, 29 por ciento.