2015, el año de la esperanza: Hugo Luna

Jal.| 9 ene. 2015

El 2015 será un año clave para Jalisco y el país, porque los ciudadanos podremos elegir entre un modelo que ha demostrado ser capaz de generar buenos gobiernos como el de Tlajomulco y otro que ha demostrado ser errático, corrupto y que ha traicionado una y otra vez a los ciudadanos.

En un año de malas noticias, con gasolinazos, aumento a las tarifas de la luz, agua, de unas cifras de inseguridad que aterran, de una violencia que no cesa y de casos de corrupción que salpican a los más altos funcionarios, los ciudadanos nos enfrentaremos a un reto mayúsculo en la búsqueda de personas correctas que dignifiquen la labor pública.

Como ya se ha visto en estos primeros días de precampaña, la guerra sucia marcará el proceso electoral. Se intentará rebajar a los aspirantes correctos al nivel de los políticos de siempre. Se buscará desmotivar a una ciudadanía que ha perdido la confianza en la mayoría de sus gobernantes bajo el discurso de que todos son iguales y de que no hay diferencias; incluso ya trabajan por hacer iguales a los políticos y los payasos.

La transa de la maquinaria del poder intentará, por todos los medios, lavar la cara y maquillar los rostros de aquellos que han representado las grandes desgracias del país. Esta misma semana, por ejemplo, nos enteramos que el Gobierno de Peña gastó en promedio 6.3 millones de pesos diarios en propaganda y publicidad el año pasado y la administración estatal de Aristóteles más de medio millón de pesos al día en los mismos fines.

El país cambiará cuando todos, ciudadanos, partidos, gobiernos y, sobre todo, medios de comunicación, seamos responsables y transitemos por el camino de la rectitud, la ética y la calidad moral.

En esta ocasión me despido, quiero aprovechar este espacio para agradecer a Crónica Jalisco por abrirme sus puertas para poder tener una columna semanal en donde, durante el último año, pude expresar mis opiniones sobre distintos temas del acontecer local y nacional.

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