Ser justo como principio para recuperar la grandeza de Nuevo León
Desde muy joven no me gustan las injusticias y hago lo que puedo por defender a los que lo necesitan. Por eso decidí estudiar Derecho, en donde además de aprender en clases, vi de cerca lo que se necesita para ser un buen profesionista y un líder competente.
En mi vida familiar y profesional, me he dado cuenta de la importancia de tener principios para hacer el bien a los demás. Tener principios es hacer lo correcto aún cuando es más fácil no hacerlo, es pensar en que todas las decisiones que uno toma, afectan a otros. Para mi, el principio más importante que uno tiene que seguir, es la justicia.
Hacer lo justo es algo que se dice fácil, pero cuesta trabajo. Hacer lo justo es actuar de tal manera que si todos actuaran así, todos tendríamos con el mejor mundo posible. En un Nuevo León justo la ley se respeta por convicción, pero también por obligación, porque los que la imparten no son corruptos. Donde a los que se porten bien y trabajen duro, les vaya bien, y no lo contrario. Un estado justo es el que no reproduce la pobreza, permitiendo que sea una condena generacional.
Ese es el Nuevo León que los ciudadanos debemos construir y por el que no podemos rendirnos. Un Nuevo León justo, orgulloso de su grandeza.